La Diputación de Gipuzkoa estudia más ayudas para combatir la enfermedad hemorrágica en vacas

La incidencia de la fiebre hemorrágica de las vacas se está extendiendo rápidamente en Gipuzkoa y este lunes la Diputación ha llevado a cabo una reunión con el sector ganadero para analizar nuevas ayudas a los afectados, aunque no se han concretado nuevas medidas. Desde el sindicato EHNE en Gipuzkoa han pedido que se amplíen las ayudas. 

Hasta ahora la Diputación se ha hecho cargo del tratamiento de los síntomas de esta enfermedad; no así de las salidas de veterinarios u otros gastos. La institución ha mostrado su disposición a incrementar el apoyo al sector, aunque no ha concretado de qué manera lo hará. Para ello, ha convocado una nueva reunión para el próximo martes.

La fiebre hemorrágica se ha extendido rápidamente y afecta ya a todo el territorio de Gipuzkoa, con 278 vacas enfermas en 132 explotaciones, según ha señalado Mikel Azpiri, Director del Departamento de Medio Rural en Euskadi Irratia. Según ha señalado, las muertes declaradas son 14, pero desde la Diputación estiman que el número real podría ascender a 91.

Desde el sindicato EHNE, Garikoitz Nazabal ha reclamado indemnizaciones para los ganaderos que están sufriendo pérdidas. Desde el sindicato, además, piden al Gobierno Vasco que adopte los mismos criterios en los tres territorios, ya que aunque la enfermedad se ha cebado sobre todo con Gipuzkoa, no se descarta que se extienda también a Bizkaia y Álava.

La Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) ha sido un nuevo golpe para el sector ganadero. Los ganaderos hablan de daños no cuantificables como la pérdida de terneros o el sobreesfuerzo de los ganaderos para vigilar que las vacas nos se deshidraten. Desde EHNE, creen que, sin ayudas, este virus será la puntilla para muchas explotaciones.

Se trata de una enfermedad vectorial infecciosa no contagiosa que se transmite por la picadura de mosquitos del género culicoides.

En el ganado vacuno esta enfermedad generalmente se resuelve en un par de semanas, aunque en algunos casos los síntomas pueden agravarse, pudiendo causar la muerte como consecuencia de que el animal deje de comer y, sobre todo, de beber.