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Mosul: los yihadistas se afeitan la barba

El Ejército iraquí, rearmado por Estados Unidos y con la presencia de asesores militares estadounidenses en el terreno, va a intentar recuperar Mosul. Y va en serio.

La batalla de Mosul ha comenzado y será decisiva para el futuro de Irak, de Siria y del califato proclamado por el Daesh. Mosul tiene dos millones de habitantes y es la capital de califato. Los yihadistas la ocuparon hace dos años y medio. Se quedaron con las armas del Ejército iraquí, que huyó, y con el dinero que había en la sede local del Banco de Irak. Implantaron su sistema político basado en el Corán y lograron dar la impresión de que nadie era capaz de echarlos de allí.

Ahora, el Ejército iraquí, rearmado por Estados Unidos y con la presencia de asesores militares estadounidenses en el terreno, va a intentar recuperar Mosul. El Ejército cuenta también con el apoyo de los soldados kurdos y de los milicianos chiíes. Sin embargo, no va a ser fácil administrar esa alianza tan compleja. Por ejemplo, no es conveniente que las milicias chiíes entren en Mosul, cuya población es mayoritariamente suní. Pero esta vez el intento de recuperar Mosul va en serio. Se rumorea que los yihadistas se están afeitando la barba para no ser reconocidos en el caso de que tengan que salir huyendo.

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