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Seis de cada diez delitos de odio en Euskadi son de carácter racista o xenófobo

El último Informe de Incidentes de Odio correspondiente a 2024 constata una caída generalizada en el número de casos registrados, pero confirma que los ataques motivados por el racismo y la xenofobia siguen dominando con claridad el mapa del odio en Euskadi.
Concentración en Bilbao contra el racismo y la xenofobia

Los delitos de odio motivados por razones xenófobas y etnofóbicas siguen siendo los más frecuentes (62 %) en Euskadi, según el último balance de la Ertzaintza, pese a que el total de incidentes registrados ha descendido por segundo año consecutivo. En 2024 Euskadi ha contabilizado 236 incidentes de odio potencialmente delictivos, lo que supone un 16 % menos que en 2023 y consolida la tendencia a la baja iniciada el año anterior.

Según el Informe de Incidentes de Odio de Euskadi, correspondiente al año 2024, elaborado por octavo año consecutivo y basado en datos de la Ertzaintza, desde 2016, los registros han mostrado altibajos, con un fuerte repunte a partir de 2020. Además, revela que la cifra actual (236) sigue siendo alta en comparación con los niveles previos a la pandemia, cuando los incidentes de odio rondaban los 120-130 anuales.

A pesar del descenso global, el informe identifica que el 62 % de los incidentes, casi seis de cada diez casos (146 de 236), tienen motivaciones racistas o xenófobas, lo que los sitúa, un año más, como la causa principal de los delitos de odio en Euskadi. En segundo lugar, se sitúan los ataques por orientación e identidad sexual, que aumentan tanto en número absoluto (54 casos frente a 45 en 2023) como en peso porcentual (23 %).

Los incidentes por motivos de ideología bajan levemente hasta los 16 casos (6 %), mientras que los ataques por razones de género caen a la mitad, de 18 a 9 casos (3,8 %), perdiendo así el lugar destacado que ocuparon en 2022. Esta fuerte reducción responde, según el informe, a los nuevos criterios de clasificación impulsados por la Sección de Coordinación Operativa y Técnica de Investigación (SCOTI) de la Ertzaintza, que desde 2023 distingue con mayor precisión entre delitos de odio por razones de género y violencia machista, canalizando los segundos a otros registros.

En cuanto a la discriminación múltiple, el informe detecta 19 casos en los que el ataque fue motivado por más de una característica protegida. En siete de ellos se combinaron motivos racistas y homófobos, y en un 70 % de los casos con múltiples motivaciones estuvo presente el componente racial o étnico.

Por tipologías delictivas, predominan las lesiones (38 %), seguidas por las amenazas (20 %), el discurso de odio (12 %) y las coacciones (9 %). Destaca también un caso de tentativa de homicidio. Geográficamente, Bizkaia concentra la mitad de los incidentes (120), seguida de Gipuzkoa (97) y Araba, con apenas el 8 % del total (19).

Aunque los datos invitan a cierto optimismo respecto a la mejora en la gestión de estos delitos, las cifras siguen alertando sobre la persistencia del odio como fenómeno criminal, especialmente contra personas migrantes y del colectivo LGTBI+.

Separación de registros: violencia machista aparte

El informe concluye que la reducción de casos tiene relación directa con una reorganización operativa interna en la Ertzaintza, que desde 2023 delegó la responsabilidad del estudio y gestión de los delitos de odio en la Sección de Coordinación Operativa y Técnica de Investigación (SCOTI). Esta unidad introdujo nuevos criterios de análisis basados en las orientaciones de la Fiscalía, cuyo objetivo era depurar los datos eliminando casos que anteriormente se contabilizaban como de odio sin serlo realmente.

Uno de los principales ajustes metodológicos ha sido la redefinición de los incidentes por razones de género, evitando que se contabilicen como delitos de odio hechos que jurídicamente se clasifican como violencia de género o violencia machista. Este cambio ha evitado el cruce estadístico entre categorías que pueden distorsionar la comprensión real de ambas problemáticas.

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