Condenan a Iberdrola y Petronor a indemnizar a un trabajador afectado por amianto

Un Juzgado de Bilbao ha condenado a Iberdrola y a Petronor a indemnizar con 324.540 euros a un trabajador en situación de incapacidad permanente absoluta afectado por una mesotelioma pleural a causa de la exposición a fibras de amianto.

Según ha informado este martes la Asociación de Víctimas del Amianto en Euskadi (Asviami), el Juzgado ha estimado la demanda presentada por un hombre que trabajó aislando las tuberías con amianto durante la construcción de la central nuclear de Lemoiz y en el mantenimiento de las centrales térmicas de Santurtzi y Pasaia, así como en la refinería de Muskiz.

La sentencia establece que Iberdrola Generación S.A. y Petronor S.A. incumplían sus deberes preventivos hacía el trabajador, posibilitando la exposición a fibras de amianto, causantes de la grave enfermedad que padece.

El demandante realizaba actividades de aislamiento en las instalaciones, empleado con diferentes empresas, ya desaparecidas, como subcontratas de grandes compañías, para lo cual cortaba o manipulaba materiales de amianto, que desprendían fibras que inhalaba.

Después de su jubilación en 2013, en  febrero de 2017 en un preoperatorio por una hernia inguinal, le detectaron un derrame y engrosamiento pleural, y más tarde le diagnosticaron un mesotelioma epitelioide en estadio IV.

Como empleado de la empresa ITASA, trabajo entre 1979 y 1981 en la construcción de la central nuclear de Lemoniz, colocando amianto en tuberías y tanques. No recibió prendas de protección especificas, no se le informó del riesgo, ni se le realizaron reconocimientos médicos, no se le lavaba la ropa, y no recibió formación ni cursillos de seguridad.

El demandante trabajó anteriormente, entre los años 1976 y 1979, en la refinería de Muskiz, quitando el amianto “viejo” y poniendo nuevo, para lo cual cortaba y manipulaba este material, y tampoco consta que Petronor cumpliera con sus deberes preventivos en relación a la exposición al amianto en sus instalaciones.

La sentencia considera acreditada la infracción de un deber de cuidado reprochable a ITASA, Iberdrola Generación y Petronor, y la existencia de un nexo causal entre este comportamiento y el resultado lesivo para el trabajador.