Día Internacional del Ictus
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Osakidetza atendió en 2024 unos 7500 casos de ictus, más de la mitad de ellos de personas mayores de 75 años

Aunque el número de casos ha descendido ligeramente respecto a años anteriores, el dato más importante es la continua reducción de la mortalidad, que en la última década ha experimentado un descenso medio anual de 2,8 puntos porcentuales.

Osakidetza atendió alrededor de 7500 casos de ictus en 2024, el 53,2 % de hombres y el 46,8 % de mujeres. Más de la mitad de los pacientes, unos 4000, eran mayores de 75 años y el 42 % de los casos correspondieron a personas de entre 46 y 75 años. Por territorios, en Álava se atendieron 929 casos de ictus, 3958 en Bizkaia y 2674 en Gipuzkoa.

Osakidetza ha informado de que, aunque el número de casos ha descendido ligeramente respecto a años anteriores, el dato más importante es la continua reducción de la mortalidad, que en la última década ha experimentado un descenso medio anual de 2,8 puntos porcentuales.

El Departamento de Salud del Gobierno Vasco y Osakidetza han ofrecido estos datos con motivo del Día Internacional del Ictus, que se celebra este miércoles, y han recordado que la prevención es una de las principales herramientas para evitar la dolencia.

En este contexto, el Hospital Universitario Donostia ha celebrado por la mañana una jornada especial para concienciar sobre el consumo de sal y su relación con la hipertensión y el ictus . Profesionales de la Unidad de Ictus del Hospital Universitario Donostia han instalado una carpa informativa para ofrecer charlas y material divulgativo sobre los efectos del consumo de sal y la relación de la sal con el ictus.

Tanto en el ictus isquémico como en el hemorrágico la hipertensión arterial es el principal factor de riesgo y el consumo excesivo de sal está directamente relacionado con el aumento de la presión arterial. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir 5 gramos de sal al día, pero el consumo medio diario en Euskadi es de 9,6 gramos. Reducir este consumo a niveles convenientes puede disminuir la presión arterial y reducir el riesgo de ictus en un 25 %.

La eliminación de sal de los alimentos es una recomendación habitual en pacientes con hipertensión, pero la adherencia a esta recomendación es baja. Así, hay una serie de sustitutos de la sal para seguir la recomendación con más facilidad y está demostrado que estos reducen el riesgo de ictus y enfermedades vasculares.

En la jornada organizada en el hospital Donostia se han repartido bolsitas con sustitutos saludables de la sal para fomentar el cambio de hábitos alimentarios entre la población y sensibilizar sobre la importancia de la prevención alimentaria. Entre estos sustitutos se encuentran la sal hiposódica (donde se sustituye parte del sodio por potasio), las mezclas de hierbas aromáticas bajas en sal, la salicornia saliva o la levadura nutricional. 

Además de esta acción de sensibilización, Osakidetza ha puesto en marcha en octubre en el Hospital Universitario Donostia el proyecto Escuela de Ictus, con el objetivo de implicar activamente a pacientes y cuidadores en la recuperación y el autocuidado. Hasta el momento alrededor de medio centenar de familias han participado en la iniciativa.

Profesionales de diferentes disciplinas ofrecen formación sobre control de factores de riesgo tras un ictus, rehabilitación, alimentación sana y mejora de la calidad de vida.

La Escuela de Ictus se integra dentro de la estrategia global de humanización e innovación en la atención al ictus impulsada por el Departamento de Salud del Gobierno Vasco y Osakidetza, así como en relación con los objetivos y acciones del Pacto por la Salud de Euskadi.

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